ZTE, el reconocido gigante chino, ha sorprendido con su destacada presencia en el MWC 2025, evidenciando que su estrategia ha cambiado radicalmente. Aunque han disminuido en visibilidad en mercados occidentales, su enfoque renovado se centra en fortalecer operaciones en regiones como el sudeste asiático, Oriente Medio y América Latina, donde su tecnología de 5G y soluciones de infraestructura están teniendo un impacto significativo.
La compañía ha atravesado desafíos importantes, especialmente con las sanciones impuestas por Estados Unidos en 2018 que afectaron gravemente su capacidad de competir. Sin embargo, en lugar de sucumbir, ZTE ha optado por una reestructuración silenciosa. Su actual prioridad es el negocio B2B, que ha demostrado ser más lucrativo que sus teléfonos móviles, los cuales ahora representan solo una parte de sus ingresos totales.
En un contexto global en constante cambio, ZTE ha encontrado nuevas oportunidades de crecimiento en sectores menos visibles pero esenciales, como la digitalización industrial. Su capacidad para adaptarse y evolucionar en medio de la tormenta geopolítica actual subraya la resiliencia de la marca. Con su stand en el MWC, ZTE envía un mensaje claro: están listos para regresar con más fuerza cuando las condiciones lo permitan.
