Robin Kaye, una reconocida supervisora musical que trabajó en American Idol durante casi 15 años, y su esposo, el músico Thomas DeLuca, fueron encontrados muertos en su hogar de Encino, Los Ángeles. La policía local respondió a una solicitud de verificación de bienestar y, al ingresar a la vivienda, descubrió a la pareja con heridas de bala en la cabeza. Ambos fueron declarados muertos en el lugar del incidente, lo que ha sido catalogado como un aparente doble homicidio.
La noticia ha dejado a sus colegas y amigos devastados. Un portavoz de American Idol expresó su tristeza por la pérdida de Robin, recordándola como una figura fundamental del programa desde 2009. Robin Kaye tocó muchas vidas en la industria musical y su ausencia se sentirá profundamente por quienes la conocieron y trabajaron a su lado. Thomas DeLuca, por su parte, era un talentoso cantautor con una carrera que abarcaba varias décadas.
Testigos en la vecindad mencionaron haber presenciado un intento de robo en la propiedad unos días antes de la tragedia. La policía aún no ha revelado información sobre un posible sospechoso o el motivo detrás del crimen, dejando a la comunidad local y los fanáticos en estado de shock ante estos trágicos sucesos.
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