
Un sismo de magnitud 4.4 se registró el 25 de agosto de 2025 en las costas de Esmeraldas, Ecuador. Según el Instituto Geofísico, el movimiento ocurrió a 85 kilómetros de la costa a una profundidad de tres kilómetros, generando un monitoreo inmediato del fenómeno. A pesar de su magnitud, el Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada (Inocar) descartó la posibilidad de un tsunami, lo que tranquilizó a la población local.
El sismo se sintió en varias ciudades cercanas, pero no se reportaron daños significativos ni heridos. Este evento sísmico se suma a otros dos sismos ocurridos el día anterior en distintas provincias, lo que ha llevado a las autoridades a recalcar la importancia de la prevención y la educación sobre cómo actuar en caso de emergencias.
Las autoridades han instado a mantener la calma y seguir las indicaciones de los organismos responsables. Ecuador, situado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, experimenta actividad sísmica frecuente, y el monitoreo constante es esencial para garantizar la seguridad de la población y minimizar el impacto de estos fenómenos naturales.