Shein se enfrenta a grandes desafíos en Europa, donde la Comisión Europea y la Red de Cooperación para la Protección del Consumidor han detectado múltiples infracciones en su plataforma. La compañía tiene un mes para abordar estas quejas o enfrentarse a multas significativas. Las autoridades han identificado prácticas como descuentos falsos y tácticas de presión para incentivar compras, lo que ha levantado serias preocupaciones sobre los derechos de los consumidores en el mercado europeo.
Las infracciones señaladas incluyen el uso de precios manipulados y la falta de información clara sobre derechos de devolución y reembolso. Además, se han denunciado etiquetas engañosas que dan la impresión de que algunos productos tienen características especiales cuando en realidad cumplen con estándares mínimos. También se ha criticado la falta de canales accesibles para que los consumidores planteen dudas o realicen reclamaciones, lo que limita la transparencia y la confianza en la plataforma.
Shein ha respondido afirmando su compromiso de cooperar con las autoridades y asegurar que sus consumidores en Europa disfruten de una experiencia de compra segura y agradable. No obstante, la presión sobre la empresa aumenta, ya que los organismos reguladores en Italia y otros países también están investigando sus prácticas comerciales. En este contexto, el tiempo corre para Shein, que debe actuar rápidamente para evitar sanciones que podrían impactar significativamente su negocio en el continente.
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