Después de cinco meses de desabastecimiento de asfalto a nivel nacional, las obras viales en Quito han vuelto a activarse con un enfoque renovado. La pausa en el suministro, que ocurrió entre abril y septiembre, coincidió con los meses de menor congestionamiento vehicular, sin embargo, la municipalidad no pudo llevar a cabo trabajos críticos durante ese tiempo. Con la reanudación de la distribución del asfalto, la Empresa de Obras Públicas del Municipio de Quito ha reorganizado su programación para recuperar el tiempo perdido.
Las principales vías que estaban paralizadas han comenzado a recibir atención nuevamente, incluyendo la vía Oswaldo Guayasamín/Interoceánica en los sectores de Pifo y El Arenal, así como la avenida Llira Ñan en Quitumbe. El Municipio también ha intensificado el mantenimiento de la Ruta Viva y la rehabilitación de la avenida Galo Plaza Lasso, utilizando un enfoque de planificación por tramos para mitigar el impacto en la movilidad de los ciudadanos.
A pesar de las limitaciones, la municipalidad ha mantenido la operatividad en otras áreas de trabajo que no requirieron asfalto, como el avance en el intercambiador de la avenida Mariana de Jesús y proyectos de mantenimiento de espacios públicos. La respuesta del Municipio ha sido ágil una vez que el suministro se normalizó, con la reactivación de contratos y ajustes de los cronogramas para asegurar un control técnico eficaz en las obras. Se recomienda a la ciudadanía que se mantenga informada sobre los avisos de obra y planifique sus desplazamientos.
