El Municipio de Quito ha decidido mantener activo el Protocolo Metropolitano Ante Eventos de Conmoción Social tras una sesión reciente del Concejo Metropolitano. Carolina Andrade, secretaria de Seguridad, informó que este protocolo, que se activó el 22 de septiembre, busca garantizar la movilidad y asegurar el funcionamiento de los servicios públicos esenciales en la ciudad durante jornadas de manifestaciones sociales. El objetivo principal es maximizar la efectividad de la respuesta interinstitucional, en coordinación con la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, para proteger a la ciudadanía y las infraestructuras estratégicas.
Entre las acciones implementadas se incluyen el monitoreo y alertas continuas desde la Sala Situacional del COE-M, así como patrullajes en áreas de alto riesgo. La Secretaría de Seguridad también ha estado evaluando diariamente posibles riesgos que puedan afectar la provisión de servicios esenciales. Durante la reciente protesta del 12 de octubre, no se reportaron daños a bienes municipales, lo que evidencia la efectividad de las medidas adoptadas y la coordinación permanente con las entidades de seguridad.
El Concejo Metropolitano ha aprobado una resolución que no solo mantiene los protocolos de vigilancia preventiva, sino que también exhorta al Gobierno Nacional a buscar soluciones mediante mesas de diálogo. Este enfoque coordinado, que incluye el uso de más de 150 efectivos y 25 vehículos para responder a situaciones emergentes, ha sido clave para permitir que Quito funcione con normalidad durante las movilizaciones y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
