Google ha dado un paso inesperado al fusionar su modelo de IA, Gemini, con la robótica, permitiendo que los robots realicen tareas en el mundo físico. Con Gemini Robotics, puedes dar instrucciones a un brazo robótico para realizar acciones específicas, como colocar uvas en un tazón. Esta innovación representa una convergencia de dos tendencias: empresas de robótica que utilizan IA y gigantes de IA que desarrollan robots.
El avance de Google no es aislado; otras compañías como OpenAI y Nvidia también están explorando el potencial de la IA física. Sin embargo, hay desafíos por superar, especialmente en la capacitación y seguridad de robots al interactuar con humanos. A pesar de que se están desarrollando robots para tareas específicas, su implementación en el hogar seguirá siendo un objetivo para el futuro debido a la complejidad y caos de los entornos domésticos.
Las pruebas en entornos controlados como hospitales y hoteles son cruciales antes de que los robots se integren en nuestros hogares. Aunque la visión de hogares automatizados es atractiva, la realidad es que pasará tiempo antes de que los robots tengan la capacidad y la seguridad adecuadas para manejar tareas cotidianas. La transformación está en marcha, y el futuro de la robótica y la inteligencia artificial nos prometen un cambio radical en la forma en que vivimos y trabajamos.
