El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se unió a miles de ecuatorianos en una marcha por la paz en Guayaquil, donde respaldó la consulta popular y criticó los obstáculos en el sistema judicial. La movilización, convocada por su Gobierno, reunió a más de 58,000 personas que marcharon pacíficamente en un acto que buscó expresar el compromiso de la nación con la paz y la justicia. Al final del recorrido, Noboa pronunció un discurso llamando a los ciudadanos a elevar su voz contra la violencia y la impunidad, destacando la importancia de la participación popular en la toma de decisiones clave.
Durante su intervención, Noboa enfatizó que la marcha debía ser un ejercicio pacífico contra aquellos que protegen a criminales en el sistema judicial. Además, aprovechó la ocasión para conectar la manifestación con la reciente consulta popular que busca la aprobación de reformas sobre seguridad y economía, resaltando que la participación ciudadana es esencial para avanzar hacia un Ecuador más seguro. La manifestación se realizó mientras varias ciudades del país llevaban a cabo protestas en contra de sus políticas, evidenciando la polarización política actual.
A pesar de las protestas opositoras que se desarrollaron en trece ciudades, Noboa posicionó la marcha como un momento crucial para cultivar unidad nacional. Con su mensaje, busca movilizar a la ciudadanía en confianza con el cambio institucional que promueve, mientras su administración enfrenta críticas sobre sus decisiones en seguridad. La marcha reafirma su compromiso de avanzar en reformas necesarias, al tiempo que gestiona la continua tensión política en el país y la respuesta de los opositores que demandan ajustes en las políticas económicas y de seguridad.
