Molly Ringwald, la emblemática actriz de los años 80, se abre sobre sus sentimientos complejos al haber sido la musa del director John Hughes. En un reciente episodio de un podcast, compartió que ha estado re-evaluando su experiencia durante esa época formativa de su vida, especialmente tras revivir sus clásicos como ‘Sixteen Candles’. Ringwald admite que, aunque en su momento no entendía del todo lo que significaba ser una musa, ahora ve las cosas desde una perspectiva diferente.
La reflexión de Ringwald incluye una discusión sobre cómo Hughes escribió el guion de ‘Sixteen Candles’ inspirado en su fotografía. A los 15 años, la actriz no tenía la experiencia suficiente para comprender las implicaciones de esa relación profesional. Sin embargo, ahora siente que hay algo peculiar en ser considerada musa de un director mayor, describiendo sus recuerdos como tanto halagadores como extraños. Esto ha llevado a Ringwald a pensar sobre cómo esa experiencia ha moldeado su vida y su carrera.
A medida que el movimiento #MeToo ha ganado atención, la actriz ha reconsiderado las dinámicas de sus películas y sus representaciones de género y poder. Tras ver ‘The Breakfast Club’ con su hija, Ringwald se cuestionó cómo estas obras reflejan actitudes sobre la subyugación femenina. Reflexionó sobre la complejidad de amar obras que, al mismo tiempo, refuerzan actitudes problemáticas. A pesar de su amor por el arte, desafía a la audiencia a recordar el pasado y a trabajar hacia un futuro más equitativo en la representación.
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