El 4 de septiembre, el Metro de Quito abrió sus puertas a medios de comunicación para mostrar las labores de mantenimiento que garantizan una movilidad segura y confiable. Durante la madrugada, cuando la ciudad descansa, un equipo especializado trabaja en la revisión y el cuidado de los diversos subsistemas del transporte. La transparencia en el funcionamiento del servicio fue destacada por el gerente general del Metro de Quito, quien aseguró la continuidad y seguridad de las operaciones.
Los medios visitaron diferentes instalaciones, incluyendo Talleres y Cocheras, el Puesto de Control Central y los cuartos técnicos. Se llevaron a cabo tareas rutinarias como el escaneo ultrasonido de rieles, limpieza de túneles y mantenimiento de estaciones, garantizando así que el Metro esté en óptimas condiciones para la jornada diaria. El mantenimiento se organiza en cinco grupos especializados que se encargan de trece subsistemas cruciales para la operatividad del sistema.
Un equipo de 90 profesionales trabaja cada madrugada en diversas tareas de mantenimiento, que van desde la limpieza de plataformas hasta la revisión de sistemas de telecomunicaciones. Para asegurar la continuidad a largo plazo en la operatividad del Metro, se planea la contratación de una empresa especializada, lo que permitirá enfrentar la creciente complejidad de las labores de mantenimiento debido al avance en el ciclo de vida de los bienes ferroviarios.
