
El gobierno de Estados Unidos ha emitido una contundente advertencia a TSMC, uno de los mayores fabricantes de chips del mundo. Si la empresa no acelera la construcción de sus fábricas en Arizona, se enfrentará a aranceles de hasta el 100%. Esta medida busca recuperar el liderazgo estadounidense en la industria de semiconductores, una sector que ha visto un declive significativo desde los años 80.
TSMC ya ha comenzado a erigir tres fábricas avanzadas en Arizona, prometiendo producir chips de última generación para importantes compañías como Apple y NVIDIA. Sin embargo, pieza clave en esta narrativa es la postura del expresidente Donald Trump, quien ve la reinversión en el territorio estadounidense como un imperativo estratégico. Su propuesta incluye impuestos que podrían incentivar a TSMC a terminar sus proyectos en el país.
La amenaza a TSMC ha generado un gran revuelo a nivel mundial, ya que EEUU busca restaurar su influencia en el sector de los semiconductores. A pesar de las tensiones, TSMC no planea renunciar a sus proyectos en Arizona, los cuales no solo incluyen la producción de chips, sino también instalaciones de encapsulado avanzado y un centro de I+D, reflejando un compromiso a largo plazo con el mercado estadounidense.