La próxima película de Disney, Blancanieves, ha generado controversia desde su anuncio. La elección de Rachel Zegler como Blancanieves provocó críticas raciales, ya que algunos seguidores se opusieron a que una actriz de ascendencia latina interpretara a un personaje descrito como de piel “blanca como la nieve”. A pesar del rechazo, Zegler ha defendido su rol y la importancia de su personaje como un símbolo de resiliencia. Además, ha insistido en que el remake abordará cuestiones de empoderamiento y liderazgo femenino, distanciándose de la representación del cuento original.
La controversia se agudizó cuando se supo que la película utilizará CGI para representar a los enanos, lo que generó críticas de actores con enanismo. Aunque Disney aseguró que consultó a expertos y personas con la condición, muchos argumentan que las oportunidades laborales fueron eliminadas. Este fin de semana en redes sociales, algunos actores expresaron su decepción, sosteniendo que estas oportunidades deberían haber ido a actores de su comunidad, en lugar de ser reemplazados por efectos especiales.
Adicionalmente, la controversia se extendió a la política, especialmente en relación a Gal Gadot, quien ha enfrentado críticas por sus comentarios sobre el conflicto Israel-Palestina. En contraste, Zegler ha tenido posturas pro-Palestina, lo que ha llevado a tensiones entre los seguidores de ambas actrices. Con el estreno programado para marzo de 2025, la discusión entre los fans continúa, sumergiendo a la película en un mar de protestas y opiniones encontradas.
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