El creador de Black Mirror, Charlie Brooker, ha revelado que el final del episodio ‘Common People’ es uno de los más desgarradores de la serie. Este episodio, que cuenta con las actuaciones de Rashida Jones, Chris O’Dowd y Tracee Ellis Ross, explora el desmoronamiento de un matrimonio común en un entorno distópico. A lo largo de la trama, la salud de Amanda se ve comprometida cuando se le diagnostica un tumor cerebral, lo que lleva a su pareja, Mike, a un viaje lleno de decisiones extremas y dolorosas que cambiarán sus vidas para siempre.
La promesa de una solución a los problemas de Amanda proviene de una empresa de neurociencia llamada Rivermind, que ofrece un procedimiento innovador para reemplazar una parte de su cerebro afectada. Sin embargo, esta solución comienza a tener un alto costo emocional y financiero, llevando a la pareja a extremos desesperados. Mike se ve obligado a realizar sacrificios personales y profesionales para mantener a flote su relación y cumplir con las exigencias económicas de Rivermind, lo que culmina en una serie de decisiones impactantes que revelan la cruda realidad de cómo el capitalismo puede afectar la vida humana.
El episodio culmina en un acto de amor desgarrador cuando Mike toma una decisión fatal que cambiará su vida para siempre. Brooker destaca la ambigüedad del final, que invita a la reflexión sobre el sacrificio y el costo del amor en un mundo donde las corporaciones controlan incluso la salud y el bienestar personal. La complejidad moral de esta historia resuena profundamente en la audiencia, dejando un eco de tristeza y crítica social sobre el estado actual de las relaciones humanas y la economía.
