El Metro de Quito ha alcanzado la notable cifra de 100 millones de viajes desde su apertura, lo que ha generado un impacto económico estimado en 147 millones de dólares. Este sistema de transporte ha tenido un efecto positivo en la economía local, facilitando el acceso a diversas áreas de la ciudad y fomentando el crecimiento del comercio, especialmente en el sector turístico.
Un total de 613 establecimientos turísticos se han beneficiado directamente de la llegada de más visitantes al Centro Histórico, lo que ha contribuido a un aumento del 11,7% en las licencias de actividades económicas. El Metro ha facilitado no solo la movilidad, sino también la reactivación de negocios que habían enfrentado dificultades debido a la accesibilidad del área.
Además del comercio, el Metro ha mejorado la conexión cultural en la ciudad, permitiendo que más personas accedan a museos y atracciones en el Centro Histórico. En general, el impacto del Metro de Quito va más allá del transporte, consolidándose como un motor de desarrollo económico que posiciona a la ciudad como un destino en crecimiento y accesible.
