
Hilda Murillo, reconocida cantante y hija de la afamada Fresia Saavedra, busca honrar la memoria de su madre con un innovador monumento sonoro. Este homenaje surge tras la muerte de Fresia el 18 de julio de 2024. A pesar del dolor por su pérdida, Hilda ha encontrado una forma de mantener viva la esencia musical de su madre, quien fue más que una artista: una guía y consejera en la vida.
El monumento sonoro tendrá un sistema de audio que reproducirá cuatro de las canciones más emblemáticas de Fresia, elegidas por Hilda. Su búsqueda de financiamiento ha llevado a la organización de un concierto benéfico el 31 de julio en el Teatro Las Cámaras, donde los asistentes podrán disfrutar de una conmovedora velada musical. Hilda estima que la inversión necesaria asciende a 20 mil dólares para hacer realidad este sueño.
La escultura, que medirá 1,55 metros de altura y será realizada por Hellen Constante, se ubicará en Puerto Santa Ana, junto a otros grandes exponentes de la música ecuatoriana. Hilda ha resaltado la importancia de preservar la identidad musical que su madre promovía, asegurando que su monumento no solo rendirá homenaje a Fresia, sino que también seguirá siendo un símbolo del legado musical que dejó a sus alumnos y al pueblo ecuatoriano.