
Gisella Bayona, periodista y presentadora de televisión, ha revelado una aterradora anécdota relacionada con Juan Fernando Hermosa Suárez, conocido como el ‘Niño del terror’, un asesino en serie que sembró el pánico en Quito en los años noventa. En un reciente pódcast, Bayona compartió cómo un viejo video de Hermosa, recluido en una correccional, la dejó helada al ver su imagen plasterada en la pared de su celda. Esta experiencia marcó un hito en su carrera y puso de manifiesto los riesgos que enfrenta cualquier figura pública.
La sensación de vulneración que experimentó Gisella al ver las fotos de su juventud en la celda de un asesino notable se convirtió en una reflexión crítica sobre la inseguridad que enfrentan las figuras públicas, particularmente las mujeres. Bayona recordó el impacto emocional que tuvo en ella y en su familia, donde su ex pareja le hizo notar la exposición peligrosa que implica su carrera. Este episodio se convirtió en un recordatorio de los peligros que conlleva el fanatismo.
A pesar de no haber conocido a Hermosa en persona ni haberlo entrevistado, la conexión inusitada que surgió entre ambos dejó una marca indeleble en la vida de Bayona. Su experiencia refleja no solo las amenazas inherentes a la fama, sino también la fascinación oscura que algunos individuos pueden sentir hacia personas en el ojo público. Para Gisella, el recuerdo de este encuentro fortuito sigue siendo un recordatorio del frágil equilibrio entre la seguridad y la notoriedad.