
Un vehículo 4×4 negro, cubierto de mensajes de desamor y traición, ha capturado la atención de Guayaquil. Este auto, que originalmente aparentaba ser un simple medio de transporte, se transformó en un ‘confesionario rodante’ con frases como ‘Infiel’ y ‘Puto’ escritas en su carrocería. Los mensajes, plasmados con rabia, son una clara manifestación del sufrimiento de quien decidió exponer públicamente una traición amorosa, transformando la frustración en arte urbano.
El auto ha generado un espectáculo inesperado en las calles de Guayaquil. Videos del vehículo circulando rápidamente en redes sociales muestran cómo atrae miradas y risas, convirtiendo un episodio de desamor en un evento viral. La escena se tornó aún más dramática cuando un agente de tránsito detuvo al vehículo, lo que provocó risas y comentarios en línea que interpretaron la situación como un verdadero guion de telenovela.
La historia del 4×4 rayado ha resonado en la memoria digital de la ciudad, donde el dolor se convirtió en un espectáculo público. Los comentarios en redes variaron entre la burla y la defensa de la intimidad. Desde bromas sobre lo que debió hacer la persona traicionada hasta debates sobre la forma de afrontar estas situaciones, el episodio evidenció que en Guayaquil, cada auto puede tener una historia que contar.