Tesla enfrenta una crisis alarmante con una caída del 13% en su ventas globales y un 45% en Europa. Para intentar revertir esta situación, Elon Musk se ha visto obligado a despedir a Omead Afshar, un alto ejecutivo y uno de sus colaboradores más cercanos. Afshar había ocupado roles clave en la firma desde su llegada en 2017, jugando un papel fundamental en proyectos críticos como la construcción de la gigafábrica en Austin, Texas.
La salida de Afshar no es un caso aislado, ya que otros altos ejecutivos de confianza de Musk también han dejado la compañía recientemente. La crisis se intensifica no solo debido al descenso en las ventas, sino también a la creciente competencia en el mercado de vehículos eléctricos y las dificultades en la producción. Estos cambios en la dirección reflejan la presión sobre Musk para estabilizar la situación de la empresa.
Musk ha manifestado que la compañía atraviesa un periodo de reorganización interna. Sin embargo, el despido de Afshar resalta la gravedad de la situación actual, ya que era conocido como el ‘solucionador de problemas’ para Musk. Ahora, con la salida de este talento clave, los desafíos en Tesla podrían intensificarse y requieren de respuestas rápidas y efectivas para asegurar la recuperación de la empresa.
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