Blake Lively ha obtenido un importante triunfo en su contencioso legal contra Justin Baldoni. Un juez le ha permitido elegir la ubicación de su declaración, asegurando un entorno más controlado. Esta decisión llega en un contexto donde se han planteado preocupaciones sobre la seguridad y privacidad de la actriz debido a la naturaleza del caso que involucra acusaciones graves de acoso sexual y represalias.
La juez Lewis J. Liman aprobó la solicitud de Lively, que implicaba que Baldoni y su equipo debían proporcionar una lista de personas que asistirán a la audiencia, además de asegurar que contaran con los recursos necesarios durante la misma. Esto contrasta con la oposición de Baldoni, quien intentó argumentar que la elección del lugar debería ser suya y criticó a Lively por utilizar su estatus de celebridad para influir en el proceso.
Este litigio ha generado una considerable atención mediática desde que Lively presentó su denuncia ante el Departamento de Derechos Civiles de California, lo que llevó a un conflicto público entre las partes. A pesar de las confrontaciones, Lively está enfocada en su testimonio, enfatizando que este asunto debe ser tratado con la seriedad que merece, alejado de cualquier espectáculo mediático.
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