
En una reciente sesión de la Comisión del Derecho a la Salud, la asambleísta Victoria Desintonio cuestionó el nombramiento de Nelson Sierra como coordinador zonal 8 del Ministerio de Salud Pública de Ecuador. Sierra, exgerente del Hospital Abel Gilbert Pontón, ha sido vinculado a presuntos actos de corrupción relacionados con contrataciones públicas, lo que ha generado preocupación en el ámbito político y social. La asambleísta destaca que Sierra ya había sido destituido por irregularidades en su gestión anterior.
Desintonio señala que, a pesar de las alertas del Servicio Nacional de Contratación Pública, Sierra adjudicó dos contratos por un total de USD 1.2 millones en septiembre de 2024, vinculados a un listado de compras con irregularidades. La legisladora también mencionó los estrechos vínculos de Sierra con proveedores investigados, resaltando que uno de ellos, Mario Aguirre, es considerado su ‘compadre’, lo que podría comprometer la transparencia de su gestión al frente de la salud pública en Guayaquil.
Este nombramiento se produce en un contexto delicado, ya que Sierra reemplaza a Karla Mishell Jiménez, quien fue destituida tras la muerte de 12 neonatos en el Hospital Universitario de Guayaquil. La intervención de Desintonio fue un llamado al ministro de Salud, Jimmy Martín, para que tome en cuenta estas preocupaciones y revise el perfil de quienes ocupan cargos clave en la administración sanitaria del país, sugiriendo que Sierra y sus asociados podrían representar un riesgo en la atención médica.