
En 2025, Ecuador ha experimentado un notable incremento en el empleo adecuado, alcanzando un promedio del 35,6% entre enero y julio. Este aumento representa un alza del 3,4% en comparación con 2024, con una cifra que se elevó al 38,6% en julio. Este repunte se refleja en el crecimiento de puestos de trabajo que ofrecen ingresos iguales o superiores al salario básico y jornadas completas, marcando un cambio significativo frente a la inestabilidad laboral de años anteriores.
Los registros de empleo formal en 2025 han mantenido su estabilidad, a diferencia del año anterior donde se observó una caída. Durante ciertos períodos, el empleo formal superó el 36%, lo cual no se había visto en años. Los sectores de construcción y comercio han sido los principales impulsores de esta tendencia positiva, beneficiándose de inversión pública y privada. Además, iniciativas estatales han contribuido a la formalización de más empleos, especialmente para microempresarios y jóvenes.
A pesar de estos avances, el mercado laboral ecuatoriano todavía enfrenta retos significativos, ya que el 51,3% de los ocupados trabaja en el sector informal. La informalidad y el subempleo siguen siendo limitaciones importantes para el crecimiento del empleo de calidad. Mientras que otros países de la región enfrentan retrocesos laborales, Ecuador se distingue por su estabilidad, en gran medida gracias a la dolarización que ha permitido controlar la inflación y fortalecer el empleo formal.