La muerte de Emilio García, conocido en el mundo del espectáculo como Emilio Sueños, ha conmovido profundamente a la comunidad artística ecuatoriana. El modelo y expanelista falleció el pasado 5 de octubre de 2025 a los 41 años, tras haber permanecido varios días en cuidados intensivos debido a complicaciones cardíacas que se presumen relacionadas con el uso de hormonas. La noticia ha dejado a muchos en shock, revelando no solo la fragilidad de la vida, sino también las realidades a las que se enfrentan personas en el mundo del entretenimiento.
Emilio, originario de Anzoátegui, Venezuela, se trasladó a Ecuador con el sueño de trabajar en televisión. Gracias a su carisma, logró posicionarse como un rostro reconocido en el programa Agárrate, transmitido por Telepremier. A lo largo de su carrera, Emilio no solo dejó huella como presentador sino también como un modelo a seguir para muchos jóvenes, al fundar la academia Emilio Models, donde ayudó a dar forma a sus sueños en el modelaje.
La Fundación Silueta X, que destacó el compromiso de Emilio con la comunidad LGBT, emitió un emotivo mensaje tras su fallecimiento. Su legado perdura no solo en su carrera, sino en la forma en que vivió su vida con autenticidad, abriendo diálogos sobre la imagen corporal y la identidad. La partida de Emilio Sueños resalta la importancia de cuidar de la salud y plantea preguntas sobre los riesgos de ciertos tratamientos en el camino hacia la transformación personal.
