Eduardo Andrade, un conocido presentador ecuatoriano, vivió un episodio tenso al llegar a Cuba y decidió compartir su experiencia en redes sociales. Andrade, quien suele ofrecer recomendaciones sobre turismo, enfrentó la rigurosa realidad de las restricciones en el país caribeño. Durante su llegada, fue retenido brevemente por la Policía de Aduanas debido a la posesión de un dron, un equipo prohibido al ingresar a la isla.
En un video, Andrade relató cómo fue separado de la fila de pasajeros para un ‘interrogatorio de rutina’. Este incidente le generó una sensación de inseguridad, lo que le llevó a tomar medidas drásticas para proteger su contenido audiovisual. A pesar de la situación, no se dejó vencer y optó por respaldar sus archivos en la nube y eliminar los de sus cámaras para evitar conflictos con las autoridades locales.
El relato de Andrade resonó entre sus seguidores y colegas, quienes compartieron experiencias similares. Este episodio destaca no solo las estrictas regulaciones de Cuba sobre el uso de tecnologías para grabar, sino también el importante rol que desempeñan los creadores de contenido como guías informales para otros viajeros, instando a quienes visitan el país a informarse sobre las normas para evitar inconvenientes.
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