La tasa de natalidad en Ecuador ha disminuido de manera significativa en las últimas tres décadas. En 2024, se registraron 215.714 nacimientos, lo que representa una caída de 94.522 con respecto a 1990. Actualmente, la tasa se sitúa en 12 por cada 1.000 habitantes, marcando el nivel más bajo en 35 años. Esta tendencia ha sido atribuida a diversos factores como el acceso a métodos anticonceptivos, cambios culturales y la elevación de los costos de crianza, que han transformado la planificación familiar en el país.
Otro aspecto a considerar es el cambio de edad en las madres; el 25.8% de los nacimientos ocurre en mujeres de 20 a 24 años, mientras que el 25.1% pertenece a aquellas de 25 a 29 años. A pesar de la disminución en la natalidad, los embarazos adolescentes continúan siendo una preocupación, con aproximadamente 30.580 nacimientos en jóvenes de 15 a 19 años en 2024. Las diferencias regionales también son notables, lo que sugiere influencias socioeconómicas en los patrones reproductivos.
El descenso en la natalidad plantea retos significativos para Ecuador, que deben ser abordados mediante políticas públicas. Se prevé que la población envejezca, aumentando la proporción de personas mayores de 65 años del 8% al 18% para 2050, lo que podría desencadenar problemas en los sistemas de pensiones y salud. Además, la planificación demográfica se vuelve crucial para asegurar el bienestar social y económico en un país en transición demográfica.
