
Los vídeos generados por inteligencia artificial (IA) están colapsando las plataformas de Instagram y TikTok, donde actualmente se presenta una saturación de este tipo de contenido. Una avalancha de vídeos de IA ha llevado a muchos a referirse a estas redes como ‘vertedero de la IA’, donde algoritmos acostumbrados a mostrar contenido humano ahora enfrentan dificultades para filtrar lo que es real y lo que no. Ante esta situación, es cada vez más complicado para los usuarios distinguir entre contenido auténtico y deepfakes.
Los spammers han encontrado una forma eficaz de atacar estos algoritmos mediante una suerte de ataque de fuerza bruta, inundando las redes sociales con vídeos generados por IA que rápidamente se hacen virales. Este método ha cambiado drásticamente la forma en que los influencers buscan reconocimiento en estas plataformas, invertiendo menos tiempo para generar múltiples contenidos. Influencers jóvenes y dinámicos están aprovechando esta tendencia, ganando gran popularidad y ganancias significativas a partir de esta técnica.
A pesar de las preocupaciones sobre la autenticidad y la calidad del contenido, las plataformas sociales parecen beneficiarse de esta lluvia de contenido generado por IA, promoviendo activamente herramientas que facilitan su circulación. Con esto, aunque algunos usuarios siguen anhelando un Internet más auténtico, muchos parecen aceptar este nuevo orden en el que la cantidad de contenido generado automáticamente eclipsa a la calidad creativa, profundizando la dependencia de la IA en la creación de medios digitales.