
China ha lanzado el proyecto Guowang, una ambiciosa constelación de satélites que busca establecerse en órbita baja de la Tierra. Aunque muchos lo comparan con Starlink, la constelación de Elon Musk, Guowang se enfoca más en aplicaciones estratégicas y militares en lugar de ofrecer servicios comerciales al público. Este proyecto, impulsado por la compañía estatal China SatNet, podría representar más que solo una solución de conectividad; su objetivo parece estar en la creación de una infraestructura que respalde las operaciones críticas del estado.
La iniciativa se ha estado desarrollando en la Nueva Área de Xiong’an, diseñada para ser un polo de innovación tecnológica. A diferencia de Starlink, que prioriza a los consumidores, Guowang no brinda detalles claros sobre sus capacidades o estructuras de servicio. La falta de un canal comercial directo sugiere que la red está más orientada hacia la seguridad y las operaciones gubernamentales, reforzando la idea de que China busca ser un actor clave en la tecnología espacial, más allá de solo ofrecer conectividad.
Desde diciembre de 2024, el ritmo de lanzamientos de los satélites de Guowang ha aumentado. Cada satélite está diseñado teniendo en cuenta funciones múltiples, desde comunicaciones láser hasta vigilancia. A medida que la red se expande, el proyecto podría transformar el panorama tecnológico global, especialmente en un contexto donde otros países, incluida la Unión Europea, buscan reforzar su autonomía en términos de conectividad. La naturaleza estatal del proyecto trae consigo implicaciones geopolíticas significativas, y los próximos meses serán cruciales para entender su verdadero alcance.