
Carrie Coon, conocida por sus papeles en ‘The White Lotus’ y ‘The Gilded Age’, ha compartido que tuvo un increíble desafío al cambiar entre ambas producciones en apenas 48 horas. La actriz, que grabó ‘The White Lotus’ en Tailandia, regresó rápidamente a EE. UU. para comenzar sus rodajes en el drama histórico ambientado en el Nueva York de 1880. Con este ritmo frenético, Coon se sintió completamente descolocada, pues no tuvo la oportunidad de prepararse adecuadamente ni de disponer de su vestuario.
A pesar de las dificultades, la producción de ‘The Gilded Age’ fue comprensiva y decidió filmar primero sus escenas de dormitorio, lo que le dio algo de tiempo para adaptarse. Sin embargo, Coon admitió que se sintió como una extraña en su propio entorno, teniendo que ajustar su actuación de inmediato. Se comparó con la incomodidad de ponerse un traje de baño mojado, indicando que la transición fue todo un reto emocional y físico, sobre todo debido al rápido ritmo de producción de la televisión.
Además de la presión profesional, Coon también tuvo que lidiar con las demandas de ser madre, añadiendo que sus hijos de 7 y 4 años no le ofrecieron tregua mientras intentaba adaptarse a su nuevo rol. A pesar de estos obstáculos, la actriz valoró el apoyo y la paciencia del equipo de producción, lo que le permitió sumergirse en sus personajes. La tercera temporada de ‘The Gilded Age’ se estrena este domingo, prometiendo cautivar a la audiencia con la versatilidad de Coon y su troupe.
Leave a Reply