El Municipio de Quito ha llevado a cabo un plan de emergencia para atender a la población del sur de la ciudad mientras se restablece el servicio de agua potable. A través de diversas entidades de atención social, se ha garantizado el acceso a la salud pública y se ha brindado apoyo prioritario a grupos vulnerables como niños, adultos mayores y personas con discapacidad. Más de 88 mil personas han sido asistidas en esta labor.
Con la participación de más de 600 técnicos, incluyendo médicos y profesionales de la educación, se han movilizado a varias parroquias afectadas, donde se han identificado a los grupos más necesitados para canalizar donaciones. En total, se han entregado miles de productos de primera necesidad, como agua, frutas y productos de higiene, beneficiando a decenas de miles de personas en sectores críticos.
Adicionalmente, se han implementado brigadas comunitarias para brindar información sobre salud y seguridad en el uso del agua, así como atención médica a niños en centros de desarrollo infantil. La Secretaría de Educación ha suspendido temporalmente las clases presenciales en las unidades educativas afectadas, sin afectar el calendario de los estudiantes. Este esfuerzo se complementa con la distribución de millones de litros de agua por parte del Municipio, mostrando solidaridad ante la crisis hídrica.
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