
Un alto funcionario del Departamento de Estado estadounidense, Darren Beattie, ha iniciado una controvertida búsqueda de información que incluye comunicaciones con una larga lista de críticos de Trump y figuras públicas. Esta investigación se centra en descubrir interacciones con personas y organizaciones que han sido consideradas como opositores dentro del debate sobre desinformación y censura. La solicitud se basa en la creación de un documento que busca una transparencia similar a la de los ‘Twitter Files’, pero su alcance ha suscitado preocupaciones sobre la privacidad y la posible intimidación de estos individuos.
Beattie, quien fue nombrado por Trump, ha indicado que su intención es restaurar la confianza del público mediante la divulgación de información. Sin embargo, muchos dentro del Departamento de Estado han calificado esta búsqueda como una ‘cacería de brujas’, especialmente debido a su enfoque en casi 60 nombres importantes relacionados con el periodismo y la crítica política. Entre los nombrados se encuentran críticos de la administración anterior y paquetes de palabras clave que tocan temas sensibles, lo que ha generado alarma sobre el uso potencial de esta información para retaliación.
El contexto de esta solicitud se da en medio del cierre de una oficina dedicada a contrarrestar la desinformación extranjera, lo que ha llevado a la preocupación de que los esfuerzos de Beattie sean una forma de manipulación política. Los temores incluyen que los documentos divulgados sean utilizados para promover narrativas sesgadas, afectando el trabajo de investigadores y críticos que trabajan en el área de desinformación. Los defensores de la libertad de prensa han expresado su preocupación por la falta de protección para las comunicaciones entre periodistas y fuentes, lo que podría crear un clima de temor en torno a la libertad de expresión.
Leave a Reply