
La reciente imposición de aranceles por parte de Donald Trump ha generado una debacle en el mercado de valores de las Big Tech. Empresas como Apple, NVIDIA y Tesla están experimentando caídas significativas, lo que ha despertado preocupaciones sobre el impacto en la inversión en inteligencia artificial (IA). Las acciones de Apple, por ejemplo, se prevé que caigan más de un 7%, con otras grandes empresas también reportando pérdidas notables.
La situación se agrava con el anuncio de aranceles del 10% sobre importaciones, que afecta particularmente a países como China y Taiwán, que son cruciales para el suministro de componentes electrónicos. Esto representa un peligroso efecto dominó que podría desacelerar el desarrollo de proyectos de IA, ya que Estados Unidos necesita importar chips y otros materiales esenciales para sus centros de datos en el país.
Las inversiones en IA son colosales, con empresas como Amazon planeando dedicar una gran parte de su capital en este ámbito. Sin embargo, los nuevos aranceles añaden incertidumbre sobre la rentabilidad de las inversiones en el sector, lo que podría poner en riesgo el futuro del desarrollo tecnológico y la competencia internacional en inteligencia artificial.