
Las principales empresas tecnológicas, incluyendo Amazon, Microsoft, Google y Meta, han experimentado un cambio significativo en sus planes de inversión en centros de datos, en medio de preocupaciones sobre la sostenibilidad de la demanda en el sector. Microsoft, que había anunciado ambiciosos planes de expansión, ahora está revaluando sus proyectos, suspendiendo la creación de nuevos centros en Estados Unidos y Europa, lo que refleja un exceso en la capacidad previamente proyectada para el mercado de la inteligencia artificial.
Joe Tsai, presidente de Alibaba, ha destacado que muchos de estos proyectos de centros de datos se han desarrollado de forma indiscriminada, anticipándose a una demanda que podría no materializarse. Esta señal de alerta ha llevado a la discusión sobre una posible burbuja de los centros de datos, donde las inversiones superan la necesidad real del mercado. La reciente decisión de Microsoft de pausar su expansión ha brindado la oportunidad a competidores como Google y Meta para captar algunos de los proyectos que se han dejado atrás.
A pesar de estos cambios, un portavoz de Microsoft ha afirmado que la compañía continuará invirtiendo en otras áreas estratégicas y que su compromiso con el crecimiento permanece firme. Mientras que se espera que la velocidad de expansión disminuya, la empresa se enfocará en optimizar la infraestructura existente. Esta reconsideración en las inversiones podría suponer un cambio de rumbo significativo en la estrategia de las grandes tecnológicas y sus capacidades en el ámbito de la IA.