Jeff Probst, el icónico presentador de Survivor, ha desvelado un curioso aspecto de su experiencia en el reality: el olor de los concursantes. En un reciente episodio de su podcast, respondió a la inquietud de una fan sobre si se tapa la nariz al abrazar a los jugadores que han estado en intensas condiciones durante días. Lo que reveló fue totalmente inesperado.
La respuesta de Probst fue clara: no se preocupa por el mal olor de los concursantes. Aseguró que su enfoque está en la dinámica del programa y en improvisar durante todo el tiempo que está en el set. Admitió, sin embargo, que los concursantes sí tienen un ‘aroma’ característico que describe como una mezcla entre el olor de una fogata y un vestuario de gimnasio poco ventilado, algo que es identificable pero parte de la experiencia.
El anfitrión también mencionó que sería divertido crear una vela con este ‘aroma de Survivor’. No es solo una broma, sino un testimonio del compromiso de Probst con el programa y su habilidad para disfrutar de su trabajo, incluso en situaciones inusuales. La conversación destaca la autenticidad y el humor que Probst aporta al emblemático programa de televisión.
