En una reciente aparición en el programa de Jimmy Fallon, Taylor Swift aclaró las especulaciones alrededor de su participación en el Super Bowl 2026. La famosa cantante reveló que su decisión de no encabezar el espectáculo de medio tiempo se fundamenta en su profunda conexión con el deporte y una fuerte razón personal: su prometido, el jugador de la NFL, Travis Kelce. Taylor explicó que toda su atención se centra en su relación y en la carrera de Kelce.
Durante la entrevista, Swift enfatizó que su rechazo no es el resultado de una oferta formal, sino de una conversación amistosa con Jay-Z y Roc Nation, el equipo responsable de la producción del evento. La cantante afirmó que no se sentiría cómoda presentando un performance de tal magnitud sabiendo que su pareja está ‘arriesgando su vida’ en un deporte que describió como un ‘ajedrez violento’.
Aunque hay quienes sostienen que su presencia en el Super Bowl podría haber apaciguado la tormenta mediática actual, Taylor dejó claro que su enfoque está en su relación con Kelce y en su nuevo proyecto musical. Con esta decisión, el protagonismo del evento recae ahora en Bad Bunny, cuya elección ha generado polémica y críticas en el panorama cultural de EE. UU.
