El Municipio de Quito ha llevado a cabo la limpieza de más de 118 mil sumideros en distintos barrios de la ciudad durante este año, eliminando alrededor de 15.812 metros cúbicos de desechos. Esta acción busca proteger a la población y minimizar los riesgos de inundaciones ante las fuertes lluvias que podrían afectar la zona. Las intervenciones se han distribuido en varias áreas, incluyendo San Antonio de Pichincha, Carcelén y Chillogallo, entre otras.
Adicionalmente, se han instalado más de 2.800 nuevas rejillas y se han incorporado 1.250 unidades de material plástico para evitar robos, de las cuales 825 ya están en uso. El trabajo también incluye el mantenimiento de 145 estructuras de captación en quebradas, donde se han evacuado cerca de 49 mil metros cúbicos de sedimentos. Las reparaciones en la red de alcantarillado se han realizado en áreas urbanas y parroquiales, buscando garantizar su operatividad durante la temporada invernal.
Estas actividades forman parte del Plan Lluvias 2025, que fue diseñado en 2024 para anticipar y mitigar los impactos de la lluvia. Para financiar estas operaciones, la EPMAPS ha destinado más de USD 10 millones en 2025. Se han ejecutado obras emergentes en zonas críticas afectadas por deslizamientos, como Guápulo y Conocoto, con intervenciones que incluyen limpieza de sumideros y construcción de enrocados de protección.
