En Quito, se han identificado 335 puntos críticos donde la acumulación de basura supera los horarios de recolección establecidos. Estos puntos no solo albergan desechos comunes, sino también muebles viejos, escombros y en ocasiones residuos peligrosos. La Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo EP) se encarga de mantener estos sitios limpios de manera continua, utilizando camiones para residuos normales y volquetas para objetos de gran tamaño.
La solución a este problema, según el gobierno municipal, radica en la corresponsabilidad ciudadana. Equipos de participación ciudadana están llevando a cabo visitas a los barrios para dialogar con los residentes sobre la importancia del manejo adecuado de los desechos y sobre los horarios de recolección. Cambiar hábitos y generar compromiso comunitario es clave para eliminar la problemática de los puntos críticos, un proceso que puede prolongarse durante semanas.
Además, se están organizando reuniones con líderes barriales para rehabilitar estas zonas y se implementan medidas disuasivas para evitar que se vuelvan a llenar de basura. La vigilancia mediante cámaras en el Centro de Operaciones de La Occidental juega un papel fundamental en la supervisión de la limpieza y la detección de problemas recurrentes. Se recuerda a la ciudadanía la importancia de sacar la basura en los horarios establecidos para contribuir a la calidad de vida en la ciudad.
