
American Eagle ha emitido un comunicado sobre la controversia que rodea su reciente campaña publicitaria con Sydney Sweeney. Desde su lanzamiento, la campaña ha generado un intenso debate en las redes sociales, donde muchos críticos han señalado que el lema ‘Sydney Sweeney tiene buenos genes’ glorifica ideales de superioridad blanca, evocando conceptos asociados con la eugenesia. En respuesta, American Eagle enfatizó que su mensaje se centra en la diversidad y en cómo cada persona puede lucir bien con sus jeans, independientemente de su contexto.
La polémica se intensificó con la participación de figuras públicas que han expresado opiniones encontradas sobre la campaña. Mientras algunos celebran el mensaje de inclusión, otros critican fuertemente el anuncio, considerándolo como una reafirmación de estereotipos perjudiciales. Algunos comentarios en las redes sociales han manifestado decepción por la respuesta de la marca, aunque otros han elogiado su valentía al mantenerse firmes en su mensaje. Las reacciones han sido tan diversas que han suscitado discusiones sobre la sensibilidad y la responsabilidad en la publicidad contemporánea.
Desde su lanzamiento, el anuncio se ha convertido en un caso de estudio en el enfoque de las marcas frente a las críticas en un entorno mediático dividido, donde la moda y la ética social chocan. A pesar de las críticas, American Eagle se ha comprometido a continuar promoviendo los jeans como símbolo de confianza personal y estilo, asegurando que cada individuo tiene su propia forma de lucirlos con seguridad. La conversación en torno a este anuncio ilustra el fino equilibrio que las marcas deben mantener entre marketing y responsabilidad social en un mundo cada vez más consciente de la diversidad y la inclusión.