
Katy Perry vivió una experiencia escalofriante durante su concierto en San Francisco, donde un mal funcionamiento de un prop casi la hace caer. Mientras interpretaba su popular éxito ‘Roar’, la cantante se encontraba montando una enorme mariposa mecánica que volaba por el aire. De repente, se rompió uno de los cables que sostenían la estructura, lo que hizo que el insecto mecánico comenzara a oscilar de manera incontrolable, generando preocupación entre el público.
A pesar de la situación alarmante, Katy logró mantener el equilibrio y no perdió la compostura. Sin embargo, tuvo que interrumpir su actuación al llegar al final de una línea de la canción, dejando el coro en manos de la pista de acompañamiento, mientras el público contenía la respiración. Después de un breve momento de incertidumbre, Perry recuperó su confianza y continuó cantando, llevándose un gran aplauso del público que la apoyaba.
El incidente fue documentado por asistentes del concierto, y Katy compartió su experiencia en Instagram, publicando una imagen de su rostro sorprendido durante el percance. Este evento se suma a un año lleno de altibajos para Perry, quien recientemente ha enfrentado varios cambios personales, pero sigue adelante con su exitosa gira, que incluye más de 50 espectáculos programados hasta finales de año.