A 30 años de la trágica muerte de Selena Quintanilla, su legado sigue vivo en la música y la cultura latina. La artista, conocida como la Reina del Tex-Mex, influyó en generaciones enteras con canciones icónicas que todavía se escuchan en fiestas y celebraciones. Desde sus inicios con el grupo Selena y Los Dinos, su carisma y talento la catapultaron a la fama, vendiendo más de 70 millones de discos a nivel mundial.
Selena no solo reinventó el sonido tejano al fusionar ritmos tradicionales con pop y cumbia, sino que también rompió barreras de género, llevando la música latina a una audiencia más amplia. Fue pionera en el crossover latino y demostró que una mujer podía ser una fuerza dominante en la industria musical. Su estilo único y su estética fashionista han dejado una huella duradera en artistas contemporáneos que la consideran una fuente de inspiración.
Su muerte en 1995 conmocionó a una vasta base de fans en América Latina, estableciendo un vínculo emocional que perdura hasta hoy. Celebraciones anuales en Corpus Christi y eventos en su honor demuestran que su luz nunca se apagará. Gracias a exposiciones, series y productos inspirados en su vida, Selena sigue siendo un ícono cultural importante, recordándonos el poder de la música y su legado en la identidad latina.
